Declarada Emergencia de Salud Pública de Importancia Internacional por la Organización Mundial de la Salud (OMS), la viruela del mono se ha convertido en una preocupación a nivel global. Con unos 16.000 casos confirmados, el actual brote se centra en hombres que mantienen relaciones sexuales con otros hombres. Y aunque se originó en Europa, también ha afectado a países de América como Brasil, Canadá o Estados Unidos. De manera especial, preocupa la situación en Brasil, cuyas autoridades, en opinión de la OMS, deberían “actuar en consecuencia”.
¿Cuándo hay que vacunarse contra la viruela del mono?
En lo relativo a las vacunas, Rosamund Lewis, especialista de la viruela del mono en la OMS, ha manifestado que no es necesaria una inmunización masiva contra esta enfermedad. Pero sí ha recomendado la vacunación en los casos en los que haya existido una exposición al virus.
Al respecto, Lewis ha señalado que “el reparto de la vacuna debe hacerse en función de las necesidades de salud pública, país por país y lugar por lugar. Cualquier persona que hubiera estado expuesta a alguien con viruela del mono debería vacunarse primero”. En la actualidad, se dispone de unos 16,4 millones de vacunas almacenadas. Y los países que las producen son Dinamarca, Estados Unidos y Japón.
Consejos para prevenir la expansión de la enfermedad
En cualquier caso, Hans Kluge, director de la OMS para Europa, ha manifestado que, por sí solas, las vacunas no son suficientes para detener la epidemia. Y ha recomendado a los individuos que estén en peligro que tomen las medidas oportunas en materia de prevención.
En este sentido, desde la OMS comparten las siguientes recomendaciones a los hombres que mantienen relaciones sexuales con otros hombres:
- Es importante considerar la posibilidad de limitar las parejas e interacciones sexuales en el actual contexto.
- Aunque la vacunación puede estar disponible para algunas personas con mayor riesgo de exposición, no brinda una inmunización total.
- En el supuesto de presentar síntomas, hay que aislarse, no mantener relaciones sexuales ni asistir a fiestas o reuniones multitudinarias.
Entre los signos de la viruela del mono se encuentran llagas dolorosas. Algunas personas que desarrollan síntomas graves pueden necesitar atención en centros de salud. Y entre los individuos con mayor riesgo de padecer una enfermedad grave o complicaciones figuran los niños, las mujeres embarazadas y los inmunodeprimidos.
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