Según el diccionario de la Real Academia Española (RAE), la privacidad es el “ámbito de la vida privada que se tiene derecho a proteger de cualquier intromisión”. Tradicionalmente, dicho término se ha asociado a un concepto físico. Pero desde la popularización de las tecnologías de la información y la comunicación (TIC), ha adquirido gran importancia la privacidad en Internet.
Pero, ¿en qué consiste realmente la privacidad digital? ¿Por qué resulta tan apetecible para la ciberdelincuencia? Y no menos importante: ¿qué se debe tener en cuenta para protegerla de esta última?
¿Qué es la privacidad en Internet?
A grandes rasgos, hablar de privacidad en Internet es hacerlo del control que ejerce un usuario sobre su información para limitar la cantidad de personas que están autorizadas a obtenerla. Básicamente, se trata de:
- Los datos personales que circulan por Internet como nombre y apellidos, documento de identidad, número de teléfono, domicilio…
- Las imágenes, vídeos, correo electrónico, geolocalización, historial de navegación, dirección IP o cualquier otro dato que facilite la identificación de una persona en Internet.
- La transmisión de información personal a través de aplicaciones, servicios de mensajería instantánea, tiendas en línea, etc.
Tal es la relevancia que ha adquirido la privacidad digital que los países más avanzados cuentan con normas específicas que la regulan. Y también con organismos encargados de velar por su cumplimiento y de sancionar a quienes vulneren la legislación.
¿Cómo intentan robar nuestros datos?
Sobre la privacidad en Internet, conviene saber que nuestros datos tienen un gran valor para las empresas… ¡y los ciberdelincuentes! En el caso de estos últimos, intentan obtenerlos sirviéndose de todo tipo de recursos. Entre ellos:
- Campañas de phishing, un tipo de ciberataque de ingeniería social que incluso puede llegar a ser motivo de despido.
- Propagación de malware oculto en aplicaciones móviles, descargas de juegos o cualquier otro tipo de software de apariencia legítima.
- Cookies de terceros.
En cualquier caso, el fin siempre es el mismo: obtener las credenciales de los usuarios de la Red y secuestrar sus cuentas para acceder a los servicios que utilizan en Internet. Como, por ejemplo, los bancarios.
10 consejos para proteger la privacidad digital
De cara a protegerse, los expertos en seguridad cibernética y privacidad recomiendan poner en práctica los siguientes consejos:
- Configurar el router con contraseñas seguras y, a ser posible, una red privada virtual (VPN).
- Si esto último no pudiese llevarse a cabo, es importante habilitar la VPN en nuestros dispositivos. De manera especial, si vamos a conectarnos a redes wifi abiertas.
- Ya que nos hemos referido a las contraseñas, otra medida a considerar es hacer uso de un gestor de contraseñas.
- De igual manera, para proteger la privacidad en Internet es fundamental utilizar la autenticación multifactor. Especialmente, a través de una llave física de hardware.
- Otro consejo interesante es instalar una pantalla de privacidad en la computadora. Así se evitará que otras personas practiquen el denominado shoulder surfing.
- Del mismo modo, se ha de prestar atención a los ajustes de privacidad de los dispositivos y asegurarse de que están activados.
- En cuanto a las aplicaciones de mensajería, también es prudente revisar su configuración de seguridad y privacidad.
- Igualmente, los especialistas sugieren emplear extensiones y apps que bloqueen publicidad y rastreadores.
- Y frente a los convencionales, apostar por navegadores que, como Tor, brinden una mayor protección en materia de privacidad digital.
- Por último, el sentido común y unas recomendaciones para el buen uso del Internet contribuirán a proteger nuestros datos en la Red.
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