Ante los rumores que apuntan a que el uso de dinero en efectivo puede transmitir el COVID-19, la Asociación Internacional de Divisas (ICA, por sus siglas en inglés) ha mostrado su preocupación a través de un comunicado. Concretamente, la organización se ha basado en una serie de referencias de expertos con el objetivo de desmontar las informaciones que asocian el dinero en efectivo con contagios por coronavirus.
En primer lugar, desde ICA observan que la Organización Mundial de la Salud (OMS) no desaconseja usar el dinero en efectivo. Sobre las recomendaciones para prevenir contagios, la OMS hace referencia a normas básicas higiénicas como el lavado de manos o el uso de gel hidroalcohólico. Y ha desmentido que el dinero en efectivo transmita el COVID-19.
En el caso del Banco Central Europeo, señala que, según los estudios realizados por laboratorios de primer nivel, el coronavirus puede sobrevivir más fácilmente en una superficie de acero inoxidable que en los billetes. Asimismo, otros análisis ponen de manifiesto que es más difícil que un virus se transfiera desde superficies porosas, como la de los billetes, que desde otras lisas.
Según Christian Hawkesby, asistente del gobernador del Banco de la Reserva de Nueva Zelanda, “el dinero en efectivo es una de las muchas superficies que tocamos con frecuencia. Y debe ser considerado como cualquier otro dispositivo de pago: una tarjeta, un smartphone o un reloj inteligente”.
Consecuencias negativas
Por otra parte, el miedo al contagio puede provocar que se deje de usar dinero en efectivo. De ser así, advierten desde ICA, un menor manejo de efectivo podría tener consecuencias negativas. Por ejemplo, la limitación de la inclusión financiera y del acceso a los bienes. Incluso se podría exponer potencialmente al público al aumento del riesgo de fraude.
Al respecto, el Banco de Francia recuerda que, a menudo, el efectivo es el único medio de pago para los ciudadanos más vulnerables. Del mismo modo, los comercios se verían perjudicados si los clientes no utilizasen billetes y monedas por temor a contagiarse.
Igualmente, la Confederación Europea de Servicios de Seguridad (CoESS), la Asociación de Empresas de Gestión de Efectivo (ESTA) y UNI Global Union Europa han hecho un llamamiento para asegurar el dinero en efectivo durante la crisis del COVID-19. Dichas organizaciones opinan que las informaciones infundadas sobre su uso pueden tener un impacto negativo inmediato en la banca, los servicios de seguridad privada, la impresión de dinero, la logística y el comercio.
Archivado en: