El trabajo remoto en Estados Unidos se ha convertido en una modalidad laboral cada vez más extendida. Al igual que sucedió en el resto del mundo, la pandemia de COVID-19 forzó a los estadounidenses a trabajar en sus casas. Y aquella obligación ha terminado convirtiéndose en un hábito del que los trabajadores no desean prescindir. Tanto es así que los empleadores tienen dificultades para imponer el formato presencial.
Crece el número de oficinas vacías tras la pandemia
En el contexto actual, muchas oficinas se encuentran vacías en comparación con febrero de 2020; es decir, antes de que el coronavirus SARS-CoV-2 obligase a la Organización Mundial de la Salud (OMS) a declarar la pandemia por COVID-19.
Y aunque directivos como Elon Musk han llegado a prohibir el trabajo remoto en Estados Unidos apelando a la productividad y la moral, la realidad es que los edificios se encuentran medio vacíos: desde Nueva York hasta Silicon Valley (California), los trabajadores reclaman flexibilidad a las empresas.
Si bien es cierto que, poco a poco, dicha demanda está dando lugar a reacciones positivas por parte de las empresas, algunas admiten que el teletrabajo conlleva una serie de desafíos. Entre ellos, garantizar unos elevados estándares de seguridad en los equipos y dispositivos conectados fuera de la oficina.
Consejos para practicar trabajo remoto en Estados Unidos con seguridad
Y es que, como sucede en otros países, quienes practican trabajo remoto en Estados Unidos se han convertido en uno de los objetivos prioritarios de la ciberdelincuencia. Y pueden ser víctimas de campañas que, entre otros fines, buscan robar información confidencial de las empresas. Una situación que obliga a tomar medidas desde dos perspectivas: la del empresario y la del trabajador.
Por lo que respecta a la primera, la guía Ciberseguridad en el teletrabajo facilita a las organizaciones implementar las medidas necesarias para que sus conexiones remotas sean seguras. Y también para proteger los equipos y dispositivos móviles, hacer un uso seguro de la nube, emplear herramientas colaborativas, etc.
Y en lo relativo a los trabajadores, estos 10 consejos, entre otras recomendaciones a considerar, les ayudarán a practicar trabajo remoto tanto en Estados Unidos como en otros países con seguridad:
- Los equipos y dispositivos de uso profesional no pueden ser usados para otro fin ni cedidos a terceros, aunque se trate de familiares o personas de confianza.
- Relacionado con el consejo anterior, los equipos y dispositivos tienen que bloquearse o apagarse cada vez que no se vayan a utilizar.
- Equipos y dispositivos han de estar protegidos con soluciones de seguridad y credenciales de acceso robustas.
- Igualmente, deben disponer de las últimas versiones tanto del sistema operativo como de las aplicaciones instaladas.
- En el caso de estas últimas, solamente se han de utilizar herramientas corporativas.
- Configurar el router doméstico para prevenir ataques Man-in-the-Middle o la distribución de malware en los equipos.
- Usar una red privada virtual (VPN) tanto en el hogar como fuera de él.
- No conectarse a redes wifi abiertas.
- Evitar prolongar la jornada laboral más allá de las horas necesarias. Un uso desmesurado de los equipos y dispositivos provoca cansancio y errores humanos que pueden ser aprovechados por los ciberdelincuentes.
- Por último, si no existe una iniciativa por parte de la empresa, es importante solicitar formación en materia de ciberseguridad, seguridad de la información y privacidad.
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