¿Cómo inició su carrera en el ámbito de la seguridad y qué factores fueron clave en su desarrollo profesional?
Mi carrera en el ámbito de la seguridad dio pie hace poco más de ocho años siendo responsable de Comunicación Corporativa y Cultura de tres de las líneas de negocio que son parte del portafolio de Johnson Controls: Tyco Integrated Fire & Security, ADT sistemas de alarmas y Sensormatic. Posteriormente, adquirí la responsabilidad de alinear de manera simultánea las estrategias de marketing de las marcas de refrigeración, aire acondicionado y automatización de edificios.
Una etapa que, sin duda, me ayudó a complementar mi desarrollo profesional, ya que coordinaba tanto lo que se comunicaba adentro como lo que llevábamos a niveles externos a través de eventos, artículos, publicidad, campañas, etc., entre otras acciones de marketing que eran de apoyo medular para las direcciones comerciales a nivel nacional.
Cabe destacar que en el camino de esta etapa conté con el apoyo de gerentes y directivos para lograr retomar el camino de la marca en su etapa de fusión. Al cabo de tres años emprendí nuevas aventuras en los sectores de la construcción y el retail. Y es en 2021 que me llega la invitación para liderar el área de Marketing y Comunicación de CAME para México, regresando al sector de la seguridad con mucho cariño.
A unos meses de mi ingreso, me sumé como colaboradora del Comité Nacional México de la Asociación Latinoamericana de Seguridad (ALAS) con la intención de explorar más sobre los alcances, necesidades y tendencias del sector, particularmente de la seguridad electrónica. Y me encantó poder ser parte de una comunidad ávida de expresar la innovación a través de la tecnología que aporta a una cultura de prevención.
Actualmente, dentro de ALAS tomo el rol simultáneo de presidir el Comité Nacional 2025 conformado por ocho vicepresidencias mediante las cuales trabajaremos para acercar a profesionales del sector a temas, capacitaciones y espacios de networking que sean de valor para su desempeño durante este año.
Desde su experiencia, ¿cómo ha cambiado la presencia y el papel de la mujer en las empresas de seguridad en los últimos años?
La representación de la mujer en el gremio de la seguridad, desde mi punto de vista y perfil profesional, considero que ha cambiado al presentarse un cambio en la forma de comercializar o vender en la industria cuando se vio al cliente/usuario final diferente en la forma que ya no se confiaba porque “el producto se vende solo” y “el cliente es el que te debe buscar”. Es ahí donde las mujeres con perfil estratégico de apoyo comercial empezaron a sumar con mayor fuerza.
Por compartir un dato, en el tercer trimestre de 2024, el 56,4% de los especialistas y consultores en mercadotecnia, publicidad, comunicación y comercio exterior eran mujeres. Según la Secretaría de Economía de México, en su portal DATA México, este dato no menciona posiciones sino actividad, lo que significa que la oportunidad de la presencia de la mujer actualmente se centraría en el desempeño de posiciones de alta dirección.
¿Cuáles son los principales desafíos que enfrentan las mujeres en este sector y qué oportunidades considera que existen para fomentar su liderazgo?
Ahora bien, dentro de la industria de la seguridad para las mujeres aún hay roles que están sesgados con asignación directa al género masculino, particularmente los puestos de alta dirección y toma de decisión. Retomo el dato mencionado en su revista hermana Seguritecnia, en el que se menciona que hasta 2022 el porcentaje de presencia de mujeres en el sector de la seguridad privada tan sólo representaba el 15%.
Por lo que el principal desafíos es y sigue siendo la igualdad de oportunidades para el desempeño de roles de alta dirección de mujeres ingenieras, comerciales o administrativas que empezaron desde abajo y conforme se desarrollan profesionalmente las oportunidades se van haciendo menos. Es ahí donde deberíamos ir colocando el foco.
¿Qué acciones cree que pueden impulsar una mayor inclusión y visibilidad de las mujeres en posiciones estratégicas dentro de las empresas de seguridad?
Considero que, al día de hoy, la creación de mesas de debate, asociaciones y comunidades hechas por y para mujeres son foros que año con año alimentan las estadísticas sobre el camino a allanar para las futuras generaciones. Mesas en las cuales destaca el trabajo en equipo, la sororidad, el análisis y el apoyo académico y profesional que se requiere como herramientas para accionar.
Lo ideal es que sea un camino constante y congruente en donde el objetivo real se base literalmente en la equidad a partir del reconocimiento de habilidades y condiciones que no sean contrapuntadas sino todo lo contrario, que se reconozca la estrategia al complementar habilidades innatas de cada género para el fin común y el de la continuidad de los negocios de una manera sana.
En su opinión, ¿qué valores o perspectivas aportan las mujeres a la gestión de las empresas de seguridad?
El rol de la mujer dentro de equipos y áreas estratégicas son de equilibrio y formación, ya que en la biología de las mujeres se destacan las habilidades en materia de creatividad, lenguaje y actividades de negociación que representen un alto conocimiento de inteligencia emocional. Si las ponemos en acción, estas habilidades fomentan el crecimiento del negocio de manera significativa en un tiempo más corto.
¿Cuál es su consejo para las mujeres que aspiran a desarrollarse profesionalmente en el ámbito de la seguridad?
La constante capacitación en materia no sólo de tecnología, negocios y normativas, sino también en el fortalecimiento de las habilidades de poder. No dejar de accionar. Siempre trabajar en función del cambio, la pasión y la equidad por construir con su trabajo un camino a las siguientes generaciones en el que predomine la cultura de oportunidades y reconocimiento sobre las habilidades que, por defecto, ofrecemos las mujeres a la industria.
De igual manera y no menos importante, estar en constante comunicación con mujeres claves que ya han traspasado ciertas barreras, confiar en su experiencia y consejos para dar continuidad a los hallazgos que en su momento fueron relevantes para que ellas pudieran desarrollarse.
Por último, la paciencia y la creatividad que, si se fusionan, el resultado desde mi punto de vista puede ser una herramienta poderosísima para crear soluciones diferentes considerando los mismos elementos o recursos que hoy son presentes. Es decir, ver situaciones desde otra perspectiva y darle forma para accionar con paciencia, ya que no somos una cultura de cambios drásticos.