En el transcurso de la inauguración de la nueva sede de la entidad, Gabriel Bernal Gómez, presidente de la Asociación Mexicana de Empresas de Seguridad Privada (Amesp), rindió homenaje a los trabajadores del sector. De manera especial, a los guardias.
Al respecto, Bernal Gómez señaló que estos profesionales fueron unos verdaderos héroes durante los momentos más difíciles de la pandemia de COVID-19. “Arriesgaron sus vidas y las de sus seres queridos al prestar servicio en primera línea, protegiendo hospitales, empresas, comercios y edificios públicos y privados”. Y, además de su labor de seguridad, asumieron tareas adicionales como el control de los accesos o el triaje de personas.
“Estos guardianes incansables se mantuvieron alerta, brindando servicios de vigilancia y protección a numerosas instalaciones que tuvieron que cerrar. Su valentía y compromiso demostraron que la seguridad privada es un pilar fundamental de la seguridad y el desarrollo a pesar de situaciones extraordinarias”, observó el presidente de Amesp.
Crecimiento del sector de la seguridad privada en México
En México, el crecimiento demográfico y la expansión urbana han impulsado el crecimiento de la seguridad privada. En el país se requieren sus servicios para proteger viviendas, centros comerciales, vialidades, etc., así como infraestructuras críticas como las redes de energía.
Otro factor de crecimiento es la profesionalización de los departamentos de seguridad en organizaciones empresariales que desean mejorar sus estrategias de protección y generar confianza en los inversionistas. Y la alta tasa de inseguridad y la percepción negativa en muchas ciudades de México también han impulsado la demanda de servicios.
Estos últimos incluyen vigilancia mediante guardias, seguridad electrónica, protección perimetral, controles de acceso, blindajes, traslado de valores, servicios de consultoría y ciberseguridad, etc.
Actualmente, se estima que en México operan unas 6.000 empresas de seguridad privada, de las cuales más de 1.500 carecen de los permisos necesarios para desempeñar su labor. Por ello, Amesp y otras asociaciones de seguridad y empresariales urgen a los legisladores a desarrollar y aprobar una nueva ley general de ámbito federal que, a través de un marco jurídico coherente y actualizado, regule el sector más eficazmente.
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