Ante la controversia suscitada por la militarización de la Guardia Nacional, el presidente mexicano Andrés Manuel López Obrador (AMLO) ha propuesto que se realice una consulta ciudadana en 2027. Concretamente, la pregunta que se trasladaría a la sociedad sería la siguiente: ¿Quieres que la Guardia Nacional continúe como una rama de la Secretaría de la Defensa Nacional (Sedena)?
La militarización de la Guardia Nacional, garante de paz
Así lo anunció el mandatario en el transcurso de su tradicional mañanera del lunes. En su comparecencia pública, López Obrador sostuvo que la militarización de la Guardia Nacional contribuirá a “seguir garantizando la paz, la tranquilidad” en el país.
El paso de dicho cuerpo de seguridad a la Sedena se produce tres años después de su creación por el propio AMLO. Inicialmente, la Guardia Nacional tenía naturaleza civil y estaba adscrita a la Secretaría de Seguridad y Protección Ciudadana (SSPC). Pero ahora, tal y como recordó el presidente en su intervención, “depende de la Sedena pero sin ser una fuerza de defensa para lo militar; la Guardia Nacional se encarga de la seguridad pública”.
En cuanto a los planes de futuro para dicho cuerpo, son ambiciosos. Según el mandatario, de 240 cuarteles se espera pasar a 500 antes de que concluya el sexenio del presidente en 2024. Y el número de elementos se debería incrementar de 115.000 a 145.000. “Lo importante es que la Guardia Nacional no quede en manos de gente irresponsable. No puede volver a suceder lo que pasó con la Policía Federal. Sería terrible”, advirtió López Obrador.
Preocupación en la ONU por el traspaso del cuerpo a la Sedena
La militarización de la Guardia Nacional cuenta con detractores tanto en México como en la Organización de las Naciones Unidas (ONU). Concretamente, la encargada de expresar su preocupación con la decisión de AMLO ha sido Nada Al-Nashif, alta comisionada interina de la ONU para los Derechos Humanos.
“Las recientes reformas dejan a México sin una fuerza policial civil a nivel federal, consolidando aún más el ya prominente papel de las Fuerzas Armadas en la seguridad pública. Las fuerzas y cuerpos de seguridad deberían estar subordinadas a las autoridades civiles”, ha advertido la comisionada.
Además, la jordana ha añadido que “es preocupante que las reformas aprobadas no incluyan ninguna disposición que garantice la supervisión civil de la Sedena. Ello plantea preocupaciones adicionales en materia de derechos humanos, incluida la rendición de cuentas”.
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