En los últimos años, tal y como ha venido informando Segurilatam, los cuerpos policiales argentinos han intensificado la adopción de armas no letales para optimizar su eficacia y reducir riesgos para los agentes, los ciudadanos y quienes sean objeto de detención.
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¿Qué se consideran armas no letales en Argentina?
Algo que ha sido posible a raíz de la aprobación, el año pasado, de la Resolución 704/2024 que autoriza el uso de armamento no letal, para la inmovilización o incapacitación de agresores, por parte de los funcionarios de las fuerzas policiales y de seguridad federales. Dicha resolución establece que las siguientes tienen la consideración de armas no letales:
- Las pistolas que inmovilizan al objetivo mediante descargas eléctricas no letales.
- Las pistolas que disparan municiones con substancias irritantes u otros productos químicos no letales.
- Los artefactos eléctricos específicos para uso policial que provocan descargas no letales.
- Los gases paralizantes.
- Cualquier otro armamento no letal aprobado conforme a la reglamentación y que cumpliera los mismos fines.
¿En qué ciudades y provincias han adoptado estas armas?
Por lo que respecta a las ciudades y provincias de Argentina que han adoptado armas no letales, Segurilatam informó en 2023 que la Policía de la Ciudad de Buenos Aires comenzaba a utilizar pistolas taser. Entre sus últimas adquisiciones se encuentra la incorporación de pistolas de color naranja que facilitan neutralizar o disuadir a una persona desde una distancia de hasta 20 metros.
En cuanto a la provincia de Córdoba, también ha sido pionera. En mayo de 2023 adquirió 1.000 armas no letales y a principios de 2024 ya contaba con más de 5.000. Estas armas se han utilizado en varios operativos, demostrando su eficacia en situaciones de violencia callejera y violencia intrafamiliar.
Por su parte, Leandro Zdero, gobernador de Chaco, presentó en marzo de este año armas no letales destinadas a los policías de la provincia. Esta iniciativa forma parte del plan Chaco Seguro, que busca modernizar el equipamiento policial y mejorar la seguridad en la región.
En el caso de Jujuy, a mediados de 2024 incorporó armas no letales en su fuerza policial. En junio de ese año, el gobernador Carlos Sadir entregó nuevo equipamiento que incluía lanzadores diseñados para neutralizar a agresores y prevenir actos ilícitos.
En lo referente a Mendoza, su relación con este tipo de armamento se remonta nada menos que a 2006 con la adquisición de 18 pistolas taser. Y su deseo es continuar dotando a sus fuerzas de seguridad de nuevas herramientas. Concretamente, se contempla la compra de un centenar de dispositivos electrónicos de inmovilización momentánea.
En Santa Fe, en marzo de este año se anunció la incorporación de 200 pistolas no letales para la policía provincial para mejorar las tácticas de intervención sin recurrir a armas de fuego. Además, su utilización irá acompañada de cámaras corporales con el fin de monitorear y garantizar el uso adecuado de dichos dispositivos.
Y en febrero de 2025, Tucumán adquirió pistolas taser para la Policía y el Servicio Penitenciario. Posteriormente, se realizaron capacitaciones para instructores en el uso de estos dispositivos con el objetivo de garantizar su correcta implementación.
Como puede observarse, es evidente que la tendencia nacional hacia la incorporación de armas no letales va en aumento y es previsible que cada vez más ciudades y provincias argentinas consideren adoptarlas para sus fuerzas policiales y de seguridad en el futuro.
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