En su actuar diario, uno de los objetivos de las autoridades de la seguridad pública y los profesionales de la seguridad privada es prevenir y combatir la violencia. Se trata de un fenómeno complejo y polifacético que afecta a individuos y sociedades de todo el mundo. Por ello, comprender el concepto de violencia es de gran importancia para abordar este problema y buscar soluciones efectivas.
Concepto de violencia: ¿qué es?
Al hacer referencia al concepto de violencia, esta última es definida por la Organización Panamericana de Salud (OPS) como «el uso de la fuerza física, el poder real o una amenaza contra uno mismo, una persona, un grupo o una comunidad que tiene como resultado la probabilidad de daño psicológico, lesiones, muerte, privación o mal desarrollo».
¿Cuántos tipos de violencia existen?
En la práctica, el concepto de violencia abarca actos y comportamientos que varían en severidad y contexto. Y entre los tipos de violencia más habituales figuran los siguientes:
- Violencia física. Implica el uso de la fuerza corporal para causar daño, lesiones e incluso la muerte. Según datos facilitados por la OPS, cerca de 500 personas mueren a diario como resultado de la violencia interpersonal en las Américas, la región con la tasa más alta de homicidios en el mundo.
- Violencia psicológica. También conocida como violencia emocional, se practica mediante acciones y expresiones que ocasionan un daño emocional o mental. En los contenidos didácticos de Segurilatam hemos prestado especial atención al acoso psicológico o moral a través del artículo dedicado a los diferentes tipos de acoso.
- Violencia sexual y de género. Abarca toda clase de actos sexuales no consentidos, así como la explotación sexual y el tráfico de personas con fines sexuales. En las Américas, una de cada tres mujeres ha experimentado violencia física y/o sexual, principalmente por parte de su pareja.
- Violencia económica. Suele producirse en el ámbito familiar. Y se refiere al control o la restricción del acceso de una persona a recursos económicos. Al perpetrarse, disminuye la capacidad de la víctima de mantenerse a sí misma y la obliga a depender financieramente de quien abusa de ella.
- Violencia doméstica. Acaece en el entorno doméstico y puede incluir violencia física, psicológica, sexual y económica. Habitualmente, es perpetrada por la pareja de la víctima o un integrante de la familia.
- Violencia social. Las actuaciones de las pandillas, los disturbios civiles o las actividades del crimen organizado son un ejemplo de la violencia que sufren las sociedades en muchos países del mundo.
- Violencia estructural. Continuando con el concepto de violencia, la estructural es un tipo de violencia sistémica resultado de estructuras sociales injustas y desiguales que perpetúan la opresión y la desigualdad.
- Violencia digital. Por último, la violencia digital o ciberviolencia es toda aquella acción que se realiza en medios digitales con el propósito de hacer daño u ocasionar sufrimiento. Se practica a través de aplicaciones de mensajería instantánea, redes sociales, foros o salas de chat por Internet, correo electrónico y comunidades de juego.
En definitiva, el concepto de violencia es diverso y, por desgracia, en muchos casos tiene efectos muy negativos en los individuos y las sociedades. Por ello, conocer las distintas clases de violencia es esencial para combatirlas. Y también poner en práctica unas medidas de prevención de la violencia.
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