La Asociación Mexicana de Seguridad Privada (AMESP), en nombre de la Federación Panamericana de Seguridad Privada (FEPASEP), ha anunciado que el 17º Congreso Panamericano de Seguridad Privada se llevará a cabo, del 15 al 18 de mayo, en el Hotel Barceló Ciudad de México.
Congreso Panamericano de Seguridad Privada: punto de encuentro para empresarios, autoridades y clientes
El Congreso Panamericano de Seguridad Privada tendrá como objetivo erigirse en punto de encuentro para que empresarios, autoridades y clientes de México y América Latina intercambien ideas y mejores prácticas. Ello con el fin de evolucionar la oferta de valor del sector a través de la incorporación de tecnología digital, modelos de profesionalización innovadores y el desarrollo de esquemas de servicios híbridos.
En relación a estos últimos, Gabriel Bernal Gómez, presidente de AMESP, ha explicado que “los esquemas híbridos de seguridad consisten en la oferta de servicios que incluyan guardias capacitados más soluciones tecnológicas como cámaras inteligentes, inteligencia artificial para el desarrollo de estrategias específicas, análisis de datos digitales, patrullaje con drones más GPS, etc.”.
Modernizar la normativa de seguridad privada en México, esencial
Por otra parte, Bernal Gómez ha señalado que es importante modernizar la normativa de seguridad privada en México a partir de las experiencias de otros países, ya que la actual es obsoleta para las necesidades del país.
“En México, la Ley de Seguridad Privada tiene más de 14 años de antigüedad. La evolución de la tecnología y la sofisticación operativa del crimen organizado obligan a que se legisle en esta materia a efecto de tener un sector mucho más ágil y coordinado con las autoridades. Es increíble que haya una ley federal y 31 leyes estatales distintas que obliguen a las empresas de seguridad privada con cobertura nacional a tramitar más de 50 permisos para poder operar”, ha observado el presidente de AMESP.
Seguridad privada en México: un sector al alza
En los últimos cinco años, según datos facilitados por la asociación, la seguridad privada ha crecido un 25% en México, descontando la suspensión de muchas actividades del sector a consecuencia de la pandemia de COVID-19. Además, representa el 1.8% del PIB y emplea a más de 800 mil personas.
Se trata, pues, de una industria de suma importancia y habilitadora de los negocios en el país y Latinoamérica en un contexto desafiante en materia de seguridad pública y con una alta incidencia de eventos delictivos.
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