Santiago de Chile acogió una reunión estratégica de El PAcCTO 2.0, un programa que persigue elevar al más alto nivel la cooperación entre los actores de justicia y seguridad de la Unión Europea (UE), América Latina y el Caribe mediante la investigación y persecución del crimen organizado.
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Ministra Tohá: “La cooperación internacional es clave en la lucha contra el crimen organizado”
La reunión contó con la participación de Carolina Tohá, ministra del Interior y Seguridad Pública de Chile, quien observó que “el crimen organizado ha tomado una dinámica de intercambio entre nuestros países muy importante. Y eso no sólo significa que podemos aprender unos de otros, sino que estamos obligados a trabajar conjuntamente para enfrentarlo”.
Si bien Tohá señaló que el crimen organizado se relaciona con homicidios y el tráfico de armas o drogas, advirtió que tiene como fin ganar dinero. “Lo que debemos hacer es arruinar sus negocios, hacerlos difíciles. Y la inteligencia tiene que apuntar también a eso, no sólo a perseguir los delitos que ya se cometieron”, indicó.
Y para combatir a los criminales instó a la colaboración, a tener un intercambio de información, prácticas y políticas públicas. “Este no es un problema que compartimos y que se replica en distintos países. Es el mismo problema y tiene características transnacionales tan predominantes que sólo se puede enfrentar con un trabajo conjunto”, subrayó la ministra.
Además, en la reunión estratégica de El PAcCTO 2.0 intervinieron, entre otros ponentes, Jaime Gajardo, subsecretario de Justicia del Ministerio de Justicia y DDHH de Chile; Claudia Gintersdorfer, embajadora de la UE en el país del Cono Sur; y Claudia Liebers, de la Dirección General de Asociaciones Internacionales (DG INTPA, por sus siglas en inglés) de la Comisión Europea.
¿Cuáles son las líneas de actuación del programa El PAcCTO 2.0?
Con el programa El PAcCTO 2.0 se pretende frenar las principales actividades delictivas de la delincuencia organizada (tráfico de drogas, seres humanos, armas de fuego y bienes culturales, ciberdelincuencia y delitos medioambientales) a través de tres líneas de actuación:
- Fortalecimiento de la colaboración de las instituciones nacionales y regionales de América Latina y el Caribe, así como de las oportunidades para el diálogo estratégico y la cooperación con la UE sobre justicia y seguridad.
- Refuerzo de las capacidades de las instituciones de justicia y seguridad para la lucha contra el crimen organizado, aplicando un enfoque de género y respetuoso de los Derechos Humanos e implicando a la sociedad civil.
- Desarrollo de la coordinación operativa de los actores de justicia y seguridad para investigar las principales áreas de actividad del crimen organizado.
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