Ante el incremento de contagios por la variante ómicron de COVID-19, los expertos han recomendado utilizar cubrebocas de calidad. Entre estos últimos se encuentran las mascarillas KN95, que en 2021 fueron uno de los productos preventivos más demandados en Amazon México.
¿Cómo son los cubrebocas KN95?
Según observan desde los Centros para el Control y la Prevención de Enfermedades (CDC, por sus siglas en inglés), las mascarillas KN95 son cubrebocas de respiración con filtro. Y se aconseja su uso por el nivel de protección que ofrecen en situaciones de contacto cercano con personas que no viven en el mismo hogar o para proteger a aquellas que corren mayor riesgo de enfermarse gravemente a causa de la COVID-19.
Siempre y cuando se trate de productos certificados, los cubrebocas KN95 filtran hasta el 95% de las partículas del aire si están ajustados correctamente. A esto último ayudan los alambres para la nariz incorporados en las mascarillas, los accesorios para fijarlas o anudando las bandas para las orejas.
¿Las mascarillas KN95 y FFP2 son iguales?
Para saber si los cubrebocas KN95 están certificados, se recomienda adquirirlos en puntos de venta confiables para evitar comprar falsificaciones. Las mascarillas KN95 suelen fabricarse en China, aunque se comercializan en muchos países. Estéticamente, son muy parecidas a los cubrebocas FFP2 y su nivel de protección es similar. La diferencia radica en su nomenclatura:
- KN95: GB2626-2006.
- FFP2: UNE-EN 149:2001+A1:2009.
Las KN95 están nombradas según la nomenclatura estadounidense y, como se comentaba anteriormente, filtran al 95%. En cambio, las FFP2 siguen la normativa europea y tienen una capacidad de filtración del 92%.
¿Cuánto tiempo se pueden usar?
Por lo que respecta a cuánto tiempo se pueden usar las mascarillas KN95, los expertos observan lo siguiente:
- Se estima que su duración puede llegar a ser de 48 horas si se utilizan en breves intervalos de tiempo.
- Pero si se usan durante más de ocho horas diarias, es conveniente desecharlas y reemplazarlas por unas nuevas.
Con el fin de evitar una utilización incorrecta o prolongada de los cubrebocas que disminuya su protección, lo mejor consultar las recomendaciones de uso del envase y recabar información en la consulta médica o una farmacia. Y cuando no se utilicen, las mascarillas deben guardarse en una bolsa o sobre de papel, una funda o bolsita de tela (algodón) o estuches portamascarillas.
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