En opinión de ACES, ¿cuál es el principal reto del sector de la vigilancia y seguridad privada en Colombia?
La Asociación Colombiana de Empresas de Seguridad (ACES) ha identificado varios retos que debemos asumir en representación de nuestros afiliados y, por consiguiente, de todas las empresas que integran el sector, independientemente del servicio que realicen.
Uno de los primeros es romper los paradigmas de capacidad y control, especialmente en las entidades gubernamentales, para que reconozcan las verdaderas fortalezas que tiene nuestro sector con el recurso humano entrenado y en los medios tecnológicos de apoyo que ayudan a que la labor de nuestros colaboradores sea mucho más eficaz.
Por parte de la seguridad privada, asumir la prestación de servicios de monitoreo y control de eventos de alto impacto es una realidad. Algunos organizadores de estos eventos ya han visto en nosotros esta fortaleza y nos han dado la confianza de realizar este control sin recurrir a las autoridades de seguridad del sitio. Y algunas alcaldías han entendido esta fortaleza y nos han delegado la responsabilidad de realizar frentes de seguridad móviles que se apoyan únicamente en la manifestación del riesgo con la fuerza pública y que, por su accionar, han reducido el impacto delincuencial en el sector asignado.
Cada día, la ciudadanía reclama más presencia de la fuerza pública en las calles. No se puede descuidar la seguridad de la ciudad, del barrio o del cuadrante al disminuir la cantidad de policías para llevarlos a prestar un servicio en partidos de fútbol o conciertos. Si bien es cierto que la fuerza pública debe estar en ellos como elemento adicional, sobre todo en el caso de las barras bravas. Pero al trasladar la función de control a la seguridad privada, sólo se necesitaría un pequeño componente de fuerza pública, que debe estar en capacidad de controlar la inseguridad que normalmente se presenta fuera del evento, al término del mismo y en el entorno cercano.
Además, según ACES, ¿qué otros desafíos enfrenta la industria de la vigilancia y seguridad privada en Colombia?
El segundo gran reto es lograr la unión de todos los gremios que representan las diferentes formas y servicios de seguridad privada en Colombia, aunque todos buscamos el mismo fin que es lograr que se haga política pública coherente con nuestra industria y que la proteja hacia el futuro cercano. Sin embargo, nuestros egos personales, la capacidad económica mayor o menor de cada organización, la afinidad con las autoridades o la particularidad de mi pensamiento han afectado notoriamente la imagen gremial.
Se ha pretendido sugerir que el más grande, el que genera más utilidad anual, debe ser el representante o vocero del sector y esto no es cierto. Se dejan atrás los principios de liderazgo y convocatoria. Hemos detectado que algunas organizaciones manipulan su poder económico para pagar menos impuestos y utilizarlo en afianzarse y en obtener contratos, así estos no le generen ninguna utilidad. Únicamente les interesa la cifra de facturación para afianzar su poder.
Especialmente en el sector residencial, existen el paradigma de «cuánto nos regalas y te adjudicamos el contrato». Los servicios ya no se contratan en procesos objetivos que miren su calidad. Disfrazándolos de medios tecnológicos o valores agregados sin costo, el contratante se vende al mejor postor para obtener contraprestaciones, ayudando así a la corrupción privada.
Al implementar estas y otras prácticas de competencia desleal, pretenden afectar a la mayoría de organizaciones que son de naturaleza familiar. Y que realmente son las que han creado la industria de la seguridad privada en Colombia, convirtiéndola en un ejemplo para muchos otros países.
Finalmente, el tercer reto, y no menor, es integrar los grandes avances de la tecnología, la inteligencia artificial (IA) en especial, a la permanencia del servicio. Representamos 400.000 empleos formales directos y se está generando el paradigma, en algunos contratantes del servicio, que esta es la forma de reemplazar a muchos de nuestros colaboradores.
Debemos hacerle conocer a todos los usuarios del servicio que la IA es otro medio que optimiza la eficiencia del factor humano, ayudándolo en la toma de decisiones y la reacción oportuna. Hasta ahora, la IA no ha logrado interactuar y mucho menos es sensible a las emociones de los humanos, como tampoco es generadora de conciencia. De ahí la importancia de su reglamentación para mantener un entorno laboral seguro y nuestras libertades.
En 2023, ¿qué iniciativas han impulsado desde ACES para fortalecer el sector de la vigilancia y seguridad privada?
Principalmente, ACES se ha enfocado en convocar a todos los gremios que representan a la industria para actuar conjuntamente ante iniciativas que generan valor a nuestras organizaciones. Muy a pesar de algunas diferencias que se han presentado, se ha logrado la participación de todos en algunas peticiones, ante la Superintendencia de Vigilancia y Seguridad Privada (Supervigilancia), que han tenido acogida. Todos los gremios han entendido que debemos seguir este camino para afrontar los nuevos retos de la seguridad privada.
Intentamos organizar un evento de seguridad que nos representara a todos, pero, lamentablemente, no se obtuvo este resultado. Sólo dos gremios, ACES y Andevip, decidimos participar y nos afianzamos con la participación de BASC Colombia. Así logramos realizar la 1ª Cumbre Global de Seguridad, el pasado 14 de noviembre, en las instalaciones de Ágora Bogotá.
Nuestra convocatoria fue atendida por 400 participantes, entre ellos representantes de otros gremios, y tuvo una excelente acogida. Asistieron Iván Nave, presidente del Senado de la República; Iván Velásquez, ministro de la Defensa Nacional; Carlos Fernando Galán, alcalde electo de la ciudad de Bogotá; y la general Sandra Hernández en representación de la Policía Nacional.
Allí logramos poner en evidencia la necesidad de la unión gremial. Y entre los generadores del evento lanzamos el Consejo Nacional de Seguridad, invitando a los gremios colegas a integrarse en él y, conjuntamente, proteger nuestro sector para lograr generar, junto a las autoridades, políticas públicas que nos afiancen hacia el futuro.
¿Qué inquietudes o propuestas le han trasladado desde ACES a la Superintendencia de Vigilancia y Seguridad Privada para mejorar y dinamizar esta industria en Colombia?
Con ACES y otros gremios hemos generado alertas a la Supervigilancia sobre las amenazas que se han creado para la prestación del servicio con medio canino. Aunque a los generadores del proyecto de ley que quieren acabar con este servicio se les demostró cómo se cuida el entorno de nuestros perros adiestrados, cómo se entrenan y la forma en que se presta el servicio, ellos insisten en tramitar el proyecto que impida la prestación del mismo.
Adicional a ello, en nuestra Cumbre Global de Seguridad le pedimos formalmente que nos permita aportar al nuevo decreto que pretende firmar el Ministerio de la Defensa Nacional sobre la nueva forma de la red de apoyo de seguridad, donde se define la intervención de nuevos actores como las entidades territoriales.
Por otra parte, se impidió la radicación de un proyecto de ley que pretendía implementar el Día del Conserje y donde se agradecía la función de seguridad privada de dicha figura, cuando está claro que su servicio no contribuye a la misma. Por el contrario, al ser un servicio integral, genera mayores riesgos para el usuario.
Para finalizar, ¿qué mensaje desean transmitir desde ACES a los empresarios y trabajadores del sector coincidiendo con la celebración del Día Nacional de la Vigilancia y Seguridad Privada y del Día del Guarda de Seguridad?
A nuestro sector y sus integrantes en todos los servicios, quiero agradecerles por el gran compromiso que tienen con este país. Así no se reconozca públicamente, la seguridad privada contribuye a que los indicadores de inseguridad pública disminuyan. Sólo nosotros entendemos la tranquilidad que generamos a todas las familias y empresas colombianas cuando llegan a sus casas a descansar o a su oficina a laborar. Y esto lo queremos realizar en otros entornos.
Desde el gerente de más alto nivel de seguridad hasta el vigilante más lejano, el personal se levanta diariamente con un objetivo: hacer de su entorno el más seguro para proteger al más próximo. La calidad del servicio de seguridad privada ha entendido que sólo lograremos la excelencia del mismo cuando nos coloquemos en el papel del otro que acude o nos necesita.
Estamos trabajando para que el sector sea aún más reconocido y le entreguen más responsabilidades que estamos en capacidad de asumir para seguir generando más empleo formal en Colombia, así como más tranquilidad a nuestros usuarios, en particular, y los ciudadanos, en general.
