De cara a los nuevos riesgos y amenazas en el entorno de la seguridad, ¿cuáles son, a juicio de MAK Extinguisher, esos elementos que hoy son necesarios para poder tener adaptabilidad?
Cada vez más personas interactúan con los datos que generan los sistemas de seguridad, impactando en la eficiencia operativa y mejorando el tiempo de respuesta ante incidentes. Antes, los sistemas de protección contra incendio y riesgos eléctricos, videovigilancia, control de acceso, etc., se gestionaban de forma independiente, lo que ocasionaba que soluciones de gran alcance en su aplicabilidad se quedaran como una solución reactiva, limitando a la estrategia de negocio.
Hoy, las organizaciones operan en un mundo más digitalizado donde se ha hecho indispensable la interacción entre los sistemas de seguridad, las tecnologías de la información y la gestión de talento en favor de la continuidad de los negocios. La automatización y la inteligencia artificial abren oportunidades, pero el factor humano también juega un rol importante al crear una cultura centrada en el bienestar común y la protección mutua. Ello puede transformar significativamente cada proyecto a la hora de detectar las amenazas que giran en torno a cada proceso.
Asimismo, la adaptabilidad está relacionada con asegurar la especialización tecnológica de los elementos que en campo, a nivel comercial, dan seguimiento y transmiten el valor añadido del proyecto a la cadena logística y al usuario final.
En este escenario, estar de la mano con fabricantes de prestigio nos da la oportunidad de innovar y actualizar nuestra visión tecnológica. Significa ir adelante para afrontar los nuevos riesgos y amenazas de la mano con el usuario final, maximizando así el aprovechamiento de las funciones de cada equipo.
En MAK Extinguisher impulsamos una cultura de seguridad y prevención en cada proyecto. David Lee señala que, en materia de seguridad, el 90% es prevención, el 5% nuestra reacción y el otro 5% cuestión de serendipia o suerte.
¿Cuáles son los principales retos a los que se enfrenta un integrador de cara a los proyectos de seguridad integral?
Lograr recabar información suficiente de las distintas áreas que conforman el proyecto para asegurar una visión global de la solución propuesta, considerar los factores que impactarán el proyecto, el acceso a información actualizada de planos, arquitectura de sistemas existentes… Aunque parece algo común para desarrollar una propuesta, hemos detectado que en las organizaciones no se cuenta siempre con esta información, incluso no hay un desarrollo de ingeniería previa ni se dispone de análisis de riesgo para los sistemas instalados.
Nuestro equipo es flexible para cubrir los requerimientos de un proyecto con un enfoque normativo, ya que las normas y estándares son importantes en la toma de decisión e implementación de las especificaciones tecnológicas.
“En MAK Extinguisher impulsamos una cultura de seguridad y prevención en cada uno de los proyectos en que nos involucramos”
Esto se considera un reto, puesto que, por lo sensible de la información, en algunas empresas no siempre se logra una visita en sitio. Esto puede comprometer la eficiencia y el recurso del sistema si no hay flexibilidad entre ambas partes para encontrar la mejor solución. Los impactos más críticos pueden ser cuando se requiere hacer adecuaciones mayores de obra civil; sin embargo, esto no es una limitante para que el proyecto se lleve a cabo.
Para mitigar este escenario se debe considerar la correcta documentación de la ejecución del proyecto y los avances de conformidad, así como detallar los entregables al inicio del proyecto para asegurar que se están cubriendo los requerimientos operativos, normativos y financieros a fin de generar mayor retroalimentación de los sistemas, considerando así el escalamiento de la tecnología y la operatividad en función de posibles nuevas necesidades.
Recomendamos que en cada proyecto de suministro e instalación de una solución, además de la garantía de funcionamiento, instalación y operación de equipos, se incluya una póliza de mantenimiento, por lo menos, durante el primer año de operación e ir más allá de las normativas internacionales. Por ejemplo, con el nearshoring, además de los estándares de calidad, las empresas deben considerar normativas relacionadas con el medio ambiente como la ISO 14001 y la ISO 45001 con enfoque a la seguridad y salud en el trabajo.
¿Cómo se estructura la dirección de MAK Extinguisher teniendo en cuenta que se trata de una empresa familiar?
Arturo Ortega ha desarrollado la visión comercial y operativa, Karla Ortega se ha ocupado de la parte robusta de ingeniería y desarrollo de estándares de calidad y Perla Ortega se ha enfocado en el desarrollo del talento humano y la estrategia financiera y de comunicación. Todos se han acompañado de la experiencia de los distintos líderes que han colaborado durante los más de 40 años de vida de la compañía y que hoy comparten los valores empresariales de comunicación asertiva, innovación creativa y lealtad colaborativa bajo el lema Servirle mejor sigue siendo nuestro sistema.
En México, las empresas familiares representamos entre el 80% y el 90% del total de las unidades de negocio. Y para fortalecer la permanencia de estas estructuras se debe trabajar en los procesos de institucionalización. Sólo el 1% de las empresas cuenta con certificaciones internacionales, indispensables para participar en cadenas productivas internacionales. De ahí la relevancia de señalarlo.
Al abordar proyectos de seguridad nos interesa contar con personas que tienen una visión más allá de una orden de compra, ya que es cuando mejor salen los proyectos. Destaca un interés genuino en comprender y diseñar una solución que reduzca un riesgo para las personas que habitan el lugar a través de algunos servicios como sistemas de protección contra incendios, extintores, inspección, videovigilancia, control de acceso, etc.