Segurilatam 003
80 Tercer cuatrimestre 2016 artículo técnico Asociaciones Y a se han cumplido unos meses del nuevo Gobierno de Perú y no son pocos los sectores po- líticos, medios de comunicación y ciu- dadanos que piden una evaluación de estos primeros días en lo que se refiere a la seguridad ciudadana. En mi opi- nión, no sería justo realizar una valora- ción seria a un fenómeno que ha te- nido una pobre respuesta por parte del Estado en los últimos 25 años. Es como ocurrió con el anterior Gobierno de Ollanta Humala, que después de cam- biar a siete ministros del Interior, di- chos cambios demostraron que, obvia- mente, no existía una clara política de Estado. Además, durante su mandato la tasa de homicidios asociada a un he- cho delictivo se elevó a 7,2 muertes violentas por cada 100.000 habitantes, cuando en el año 2011 teníamos una tasa de 4,8 muertes violentas. Este aumento de los homicidios pre- ocupaba de igual manera que otras modalidades delictivas, como el sica- riato, la extorsión o los raqueteros , que también elevaron su actividad. Por todo ello, la población y la prensa exigían al último ministro del Interior, José Luis Pé- rez Guadalupe, que solucionara el pro- blema de la inseguridad ciudadana. Con esto dejo en claro que es impo- sible pedir resultados positivos en un corto plazo; lo correcto para razonar al- guna evaluación sería esperar las pro- puestas integrales que el Gobierno dará en los primeros días de 2017, cuando vence la fecha de las facultades legis- lativas otorgadas por el Congreso de la República. Es importante señalar que, en relación a los homicidios, nos encon- tramos con cifras relativamente bajas si las comparamos con otros países de la región; sin embargo, lo preocupante es la tendencia al alza que tenemos ac- tualmente. Lo realmente importante, en todo caso, es que se debería trabajar en una clara política de Estado en materia de seguridad ciudadana. De esa forma se podrán sentar las bases para marcar una hoja de ruta y diseñar el trabajo a efectuar a corto, medio y largo plazo. Sólo así se reducirá paulatinamente el número y frecuencia de los delitos. Todos los informes y encuestas seña- lan que el principal problema para la sociedad en su conjunto es la insegu- ridad ciudadana. Para obtener mejores resultados, el Estado peruano debería desarrollar adecuadamente el espíritu de la Ley 27933, Ley del Sistema Nacio- nal de Seguridad Ciudadana –que en la práctica y con los resultados obteni- dos es un verdadero fracaso–, de ma- nera que responda a una concepción holística, transversal, integral, multisec- torial, intergubernamental, social e in- clusiva, con la importante participa- ción de la sociedad organizada. ¿Por dónde empezar? Hay tanto que hacer, que la princi- pal pregunta es por dónde empezar. Frente a un problema que ha de tener una respuesta trasversal a nivel de Es- tado, deberían empezar por realizar reformas estructurales en las principa- les instituciones que son los eslabones de la seguridad: la Policía, la Fiscalía, el Poder Judicial y el sistema peniten- ciario. Estas instituciones deben tra- bajar para dar una respuesta integral y articulada, situación que en la actua- lidad no ocurre. Pero, además, como no sólo se trata de trabajar los efectos sino paralelamente las causas, se de- ben sumar otras instituciones de go- bierno, como los ministerios de Edu- cación, Salud, Trabajo, Vivienda y de la Mujer, así como los presidentes regio- nales y los alcaldes. César Ortiz Anderson Presidente de la Asociación Pro Seguridad Ciudadana (Aprosec) En seguridad no se pueden dar valoraciones prematuras
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