Segurilatam 015

28 Tercer cuatrimestre 2020 artículo técnico Infraestructuras críticas que otra empresa pida un crédito a su nombre. En estos casos, lo habitual es que los perjudicados sean otros. Las víc- timas pueden ser ciudadanos que con- fían en la marca suplantada, quienes son engañados por una organización muy diferente. Por la responsabilidad de la empresa ante la sociedad, y por el daño reputa- cional y otras afectaciones que puede suponer, las compañías deben com- batir con fuerza estas modalidades de fraude. Lamentablemente típicos son los casos en que se suplantan mediante páginas web a empresas y ofrecen gan- gas por renovación de sus supuestas flotas de coches. La víctima entrega un anticipo para apartar la unidad, de la que nunca más sabrá. Monitoreo de la red Una forma básica e imprescindible de combatir estos ilícitos es el monitoreo de la red para poder actuar de forma tem- prana. Las modalidades para estos ilícitos son varias y, en ocasiones, la detección se complica bastante. Pero en algunos casos se pueden evitar a tiempo. Por las actuales circunstancias económicas, pro- bablemente estén aumentando moda- lidades de fraude más enfocadas en las necesidades de ingresos de las víctimas que en las de gastos. Por ejemplo: Concesiones de supuestos créditos en condiciones fantásticas por parte de la institución financiera suplantada (la víctima hace un pago por concep- tos como gastos notariales o pólizas para el préstamo). Ofertas de trabajo en nombre de la compañía suplantada (aquí muchas veces no piden dinero sino una gran cantidad de documentos que la víc- tima termina enviando a correos no corporativos y que pueden usarse para el robo de identidad). Una adecuada tecnología de monito- reo de la Red, tanto la superficial como la profunda, ayuda mucho a prevenir. Sin embargo, cualquier empresa podrá internamente y sin emplear grandes re- cursos, aun de un modo más artesanal, detectar la usurpación de algo tan pre- ciado como la marca, su propiedad in- dustrial, su identidad, su historia, para no permitir el abuso de la misma en perjuicio de los ciudadanos. También es aconsejable, y habitual, la colaboración en la alerta a otras com- pañías del sector cuando se detecta en el monitoreo propio que al vecino le es- tán usurpando su identidad. Y ahí, por supuesto, la compañía afectada debe realizar las gestiones correspondientes. Y no por obvio podemos dejar de se- ñalar, en fin, otro factor que contribuye al aumento de casos de fraudes y su- plantaciones. Internet y las redes socia- les son un medio más propicio para ello que el físico, tanto en lo que respecta a personas físicas como a empresas. La vía remota priva a los sentidos de tantas señales de alerta, hay tanta información al alcance sobre identidades a suplantar y tantas herramientas digitales para ex- plotarla, que ponerse la piel del cordero ya quedó anticuado hasta para el lobo. Ojos abiertos En la imparable carrera de la digitaliza- ción hay que seguir incrementando es- fuerzos con el objetivo de parar la apa- rejada carrera del fraude. Y son notables los esfuerzos por parte de autoridades y compañías, también de manera con- junta, trabajando los sistemas de con- trol para el combate a este fenómeno. Con énfasis en tecnología, seguridad de la información y monitoreo, si bien tam- bién debe trabajarse la mayor sensibi- lización del ciudadano y del empleado en la necesidad de cuidado y desarro- llo de criterio ante información y desin- formación. El factor clave para prevenir es la persona, a quien una industria del fraude que opera a gran escala, y desde cualquier parte, pone a prueba a todas horas y cada vez con mayor in- tensidad. Debe tratarse, por tanto, de mantener los ojos abiertos hasta estor- nudando. En la imparable carrera de la digitalización hay que seguir incrementando esfuerzos con el objetivo de parar el incremento del fraude