El estudio y la formación en inteligencia para la seguridad nacional en México han sido complicados debido al alto grado de politización que históricamente ha conllevado el tema. El desinterés que predomina por desarrollar una cultura de inteligencia en el país, en contraste con otras naciones donde es materia de estudio en universidades, y es incluso practicada y utilizada por una amplia gama de instituciones públicas y privadas, es un tema que ha obstaculizado su afianzamiento como materia de estudio y de divulgación del conocimiento.
En la actualidad, la seguridad nacional en México cuenta ya con un marco normativo que establece su objetivo y ámbito, identifica las principales amenazas contra el estado-nación y el desarrollo nacional y asigna responsabilidades específicas a la administración pública, los poderes de la Unión y las entidades federativas, además de ofrecer los mecanismos institucionales para el desempeño de esta singular actividad de gobierno.
Sin embargo, este es un cuerpo jurídico relativamente nuevo (2005), y en proceso de mejoramiento, que aún no termina de armonizarse con leyes existentes y se complementará seguramente en el futuro inmediato con nuevas reglas.
Herramienta de progreso
Pese a estos avances formales, la imagen pública que se ha construido en torno a la inteligencia civil sigue siendo adversa, pletórica de mitos e ignorancia que evitan comprenderla en su justa dimensión e imposibilitan destacar su necesidad, naturaleza y principios, lo cual, sin duda, ha impedido el desarrollo de la enseñanza de esta disciplina de estado tan importante para la conducción eficaz de los asuntos gubernamentales.
La acción de gobierno requiere de inteligencia estratégica útil y confiable, producto de una búsqueda sistemática, una selección metódica y juiciosa, evaluación y análisis. Y también su difusión y explotación oportuna y pertinente que soporte los procesos de toma de decisiones y el diseño de políticas públicas integrales e incluyentes.
Es decir, la gobernabilidad democrática precisa de la inteligencia como herramienta indispensable no sólo para identificar vulnerabilidades, riesgos, amenazas y antagonismos, sino también las fortalezas y oportunidades del Estado para afrontar con éxito un entorno siempre incierto y cambiante.
De ahí la necesidad de formar cuadros especializados en la materia que, con el profundo conocimiento de la inteligencia como disciplina, desarrollen competencias y capacidades para la generación de productos que apoyen la toma de decisiones.
Lo anterior impactará, sin duda alguna, en una mejor conducción de la seguridad nacional en México, la gobernabilidad del Estado y la creación de mayores oportunidades para el desarrollo político, económico y social del país.
José Luis Calderón Arózqueta: experto en inteligencia para la seguridad nacional
Con una experiencia de más de 30 años en el desarrollo de recursos humanos de organismos de seguridad del Estado, José Luis Calderón Arózqueta está especializado en inteligencia para la seguridad nacional; concretamente, en sistemas de información, agendas y sistemas de inteligencia. Autor de artículos, obras y ensayos, actualmente es director general de Apoyo Técnico en el SESNSP y coordinador académico de la especialización y la maestría en Inteligencia para la Seguridad Nacional del Instituto Nacional de Administración Pública (INAP). Y además de en la citada institución, ejerce de profesor en el Centro de Investigación y Seguridad Nacional (CISEN) y el Instituto Tecnológico Autónomo de México (ITAM).