Editorial
“Ser lo que soy, no es nada sin la Seguridad” (Shakespeare)
Primer cuatrimestre 2016
3
Ana Borredá
Directora de
Segurilatam
Creemos
que ha llegado
el momento de
tender puentes
de conocimiento
entre Europa y
Latinoamérica
con un nuevo
medio de
comunicación
especializado
en seguridad
integral
Un reto apasionante
L
a revista
Seguritecnia
nació en 1980 gracias a su fundador, don Ramón Borredá,
quien entendió que el momento de expansión en España de la seguridad pri-
vada merecía tener un soporte editorial riguroso, veraz e independiente que
contribuyese a impulsar y consolidar dicha actividad. Su primera edición se presentó
en el Salón Internacional de la Seguridad (SICUR) de Madrid y desde entonces no sólo
se ha consolidado como publicación. Además, ha propiciado que su editora, Borrmart,
haya creado otras cabeceras especializadas en seguridad como
Formación de Seguridad
Laboral
y
Red Seguridad
, así como portales de contenidos y
newsletters
, constituyéndose
en una editorial líder y referente del conocimiento en materia de seguridad integral.
Durante estos años hemos ido tomando contacto con el mundo de la seguridad en
Latinoamérica. En 1983 viajamos a Caracas (Venezuela) para participar en la I Muestra
Española de Materiales y Equipos de Seguridad, organizada por SICUR. Una primera y
enriquecedora experiencia a la que siguieron nuestras visitas a ferias como SICUR La-
tinoamérica (Chile), Expo Seguridad México o E+S+S (Colombia) que nos han dado la
oportunidad de conocer las industrias locales y estrechar lazos con sus profesionales.
Actualmente, las amenazas que presionan a la sociedad global están propiciando la
aparición de una nueva generación de profesionales de la seguridad en toda Latinoa-
mérica, cada vez con mayor nivel de formación y profesionalidad, que demandan más
información de calidad. Tenemos plena conciencia de este proceso, porque, como re-
sultado de nuestra apuesta por los formatos digitales, desde hace cinco años aumen-
tan día a día nuestros lectores en países latinoamericanos, a la vez que se incrementan
las consultas que recibimos de esos mercados. Por otra parte, cada vez más empresas de
seguridad, tanto españolas como extranjeras, fijan su punto de mira en América Latina.
Por dicho motivo, creemos que ha llegado el momento de tender puentes de cono-
cimiento entre Europa y Latinoamérica con un nuevo medio de comunicación especia-
lizado en seguridad integral,
Segurilatam
, que se distribuirá tanto en los países de la re-
gión como en sus ferias y eventos más importantes en materia de seguridad.
Como es habitual en todos nuestros proyectos, el objetivo principal es apoyar el de-
sarrollo del sector de la seguridad, difundir conocimiento, compartir experiencias y ten-
der puentes buscando sinergias entre los países de habla hispana. Porque tenemos el
convencimiento de que hoy, en nuestro entorno, disponemos del saber y la experien-
cia suficientes en todos los ámbitos de la seguridad para constituir una comunidad de
doctrina que se exprese en nuestro idioma común y, sin dejar de acudir a otras fuentes,
constituirnos en referente a escala internacional.
Fieles a nuestra tradición, la presentación de
Segurilatam
tuvo lugar, el pasado mes
de febrero, en la última edición de SICUR. Y es ahora, en Expo Seguridad México,
donde damos a conocer la publicación a los profesionales latinoamericanos. Y, poste-
riormente, también nos encontrarán en ferias como como Seguritec Perú, la ya citada
E+S+S o Intersec Buenos Aires (Argentina).
Ciertamente, nos enfrentamos a un reto apasionante y lo hacemos precisamente así,
con la pasión que ponemos en todos nuestros proyectos y con la esperanza de que
nuestro esfuerzo sea útil para la seguridad general, a la que todos debemos contribuir
desde nuestras respectivas posiciones. Pero no estamos solos; nos acompaña un buen
número de amigos, profesionales, empresas e instituciones que han puesto a nuestra
disposición su conocimiento. A todos ellos, mi más sincero agradecimiento, extensible
a nuestro equipo editorial, tan profesional como infatigable y del que, sin duda, don Ra-
món Borredá estaría orgulloso.